Este artículo se aparta, aparentemente, de la línea de este blog, tratando temas de divulgación científica en vez de los habituales sobre relajación, meditación y conciencia plena; la idea es proporcionar una base de conocimiento que haga más fácil el entender conceptos como "sentirse uno con todo lo existente" o "el Ser es uno e indivisible" que aparecen en meditación. Puede suceder que se experimenten esos estados mientras se medita, y al acabar la sesión la mente se quede aturdida, incapaz de relacionar sus conceptos intelectuales con lo que se acaba de experimentar. Reflexionando sobre lo que tratamos en este artículo puede ayudar a integrar el conocimiento intelectual con la experiencia.
La vida vista como propiedad emergente
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Estructura de un virus. https://www.sciencelearn.org.nz/ |
Alrededor nuestro vemos la diversidad de la vida, de seres vivos, que son sistemas complejos, altamente organizados, estructurados, con muchas funciones actuando coordinadamente para mantener la vida. Lo que es la vida en sí es de difícil definición, pues es más que simplemente la suma de muchas estructuras bioquímicas; un virus no es más que una estructura simple que encierra una molécula de ADN, pero esa estructura está "diseñada" para romper las membranas celulares, colarse dentro de la célula, y re-programarla para convertirla en una fábrica de virus idénticos al original. Una estructura simple que actúa como un organismo parásito, infectando organismos más complejos (vivos) y los usa para reproducirse a si mismo.
Antes de que existiera lo que llamamos vida sobre la Tierra, antes incluso de que existieran virus, se crearon en el océano Tierra las macro-moléculas llamadas proteínas, que tenían la capacidad de replicarse a sí mismas a partir del material del medio ambiente, del mismo modo que los seres vivos; si tenemos curiosidad por los detalles sugiero el artículo Génesis (II): el origen de la vida, a nivel divulgativo, sin complicaciones para expertos. De la complejidad bioquímica surgió la vida, pero la línea divisoria entre bioquímica y vida es difusa. No sabemos distinguir claramente qué es lo que produce y define la vida. Sabemos distinguir entre un ser vivo y un ser inerte, por observación directa, pero si analizamos detenidamente, intelectualmente, la diferencia entre ambos llegamos a un punto donde todo se difumina, en los dominios de la química. Cuando una propiedad, como la de estar vivo, surge de entre otras propiedades, estructuras y funciones, como en este caso de las funciones bioquímicas y de las estructuras del organismo vivo, sin que esté claro cómo surge (siendo más que la suma de las partes) decimos que esa propiedad es emergente, "emerge" de la base que lo sustenta sin que sepamos todos los detalles de tal emergencia.
La inteligencia vista como propiedad emergente
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Inteligencia, y emoción |
La definición usual de inteligencia la limita a una facultad de la mente que posibilita las funciones cognitivas de aprender, entender, razonar, tomar decisiones y formarse una idea de la realidad. Bien. Cuando el virus de la ilustración anterior contacta con una célula, los diversos "pinchos" que están distribuidos por la cubierta del virus se enganchan a la célula, y "algo" en el virus (afinidades químicas y otros efectos) lo detecta: el virus inyecta su ADN en la célula para re-programarla y eventualmente destruirla. ¿Es este un comportamiento inteligente? En este proceso, que es complejo en sus detalles, hay percepción (contacto con la célula victima), hay decisiones programadas (acoplarse a la célula, perforar su membrana, inyectar el ADN letal), y hay un objetivo: la reproducción. ¿Dónde está la mente que lo dirige todo? En ningún sitio. Es un proceso programado, pero inteligente sin duda.
Podemos ver la inteligencia también como algo que emerge de la propia Naturaleza, que vemos actuar en todas las escalas posibles, desde un objeto que cae al suelo debido a una "ley de la gravedad" inmanente, pasando por el virus que parece saber muy bien lo que se hace, hasta los organismos superiores, que han desarrollado su propia maquinaria de percibir y de pensar: un sistema nervioso y un cerebro. Quizá hemos estado viendo la inteligencia, y la mente, desde un punto de vista muy centrado en el ser humano, un punto de vista sesgado; en realidad, la inteligencia está por todos sitios, en mayor o menor grado, con más o con menos consciencia (en la piedra que cae o en el virus, nula o casi nula), por ello se puede definir como otra propiedad emergente de la Naturaleza.
Consciencia e individualidad, propiedades emergentes
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¿Es consciente? ¿Es un individuo? ¿Lo sabe? |
La consciencia es una propiedad de la mente que tampoco podemos describir con exactitud, ni podemos analizar y descomponer en partes constitutivas; simplemente surge, en menor o mayor grado, acompañando al despliegue de funciones cognitivas superiores. Occidente ha descubierto recientemente lo que otras culturas más antiguas sabían desde hace milenios: la consciencia puede entrenarse y desarrollarse, puede hacerse crecer, tanto en amplitud como en profundidad, y al hacerlo el cerebro se adapta, se optimiza, y con él, todo el sistema nervioso y las funciones cognitivas. No es sólo una facultad humana: al ser una propiedad emergente, tampoco podemos establecer una línea definitoria "aquí hay consciencia, aquí no la hay", siempre será relativa; ¿tiene consciencia un perro? ¿y un recién nacido? ¿y una mariposa?
Del mismo modo, la individualidad desde el punto de vista humano es una vivencia, es un sentirse ser alguien, también es una idea. ¿Se siente ser alguien un perro? ¿Y un niño de un año? ¿Somos más conscientes los adultos que los niños? ¿En qué sentido? En algunos meditadores avanzados la expansión del campo de conciencia les lleva a expandir también su individualidad, sintiéndose uno con todo, y al mismo tiempo seguir siendo alguien más allá de todo. Vemos que la individualidad también tiene muchos grados, y no está clara la linea divisoria entre sentirse ser alguien y no sentirse ser nadie.
Nosotros, propiedades emergentes de la realidad
Vida, inteligencia, mente, consciencia e individualidad, son fenómenos emergentes de la Realidad, surgen de ella, de forma temporal; se generan desde el Todo y se vuelven a absorber en el Todo. Reflexionando sobre ello, podemos ver que nos damos, quizás, demasiada importancia, nos lo tomamos todo de forma demasiado personal, pues todo lo que nos define, mejor dicho, todo lo que creemos que nos define, vida, cuerpo, mente, consciencia e individualidad, no son realmente "nuestras", son propiedades emergentes de la realidad, están por todos sitios, y nosotros somos expresiones temporales de esas propiedades, tal como una ola es una expresión temporal de un único océano.
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Un mar de individualidades conscientes, temporales |